viernes, 26 de octubre de 2007

CAMPECHE DE CARPIZO PETROLERO

A FUEGO LENTO
CAMPECHE DE CARPIZO PETROLERO
POR PASTOR CRUZ CARRANZA(Exclusivo para Voces del Periodista)

Esta entidad del sureste mexicano, cargada de múltiples historias de piratas, saqueos, traiciones e infamias combinadas entre el desprecio centralista y el pragmatismo acomodaticio de sus gobernantes, que en los últimos 30 años han estado bajo la caprichosa e insoportable sensibilidad del jurista Jorge Carpizo MacGregor y su poderosa cofradía que mediante el secuestro jurídico-político hacen de Campeche, por conducto del despacho Carpizo-Rocha Lanz, lo que les viene en ganas, y con el ex gobernador Rafael Rodríguez Barrera inducen a los que deberán gobernar la entidad con el perfil de la casa de las locas, esta de fiesta con el nuevo estatus de "Estado Petrolero", gracias a las gestiones cristianamente inteligentes de Jorge Carlos Hurtado Valdez y los viejos recuerdos mozos de Felipe Calderón Hinojosa, cuando acompañando al ideólogo de las concertacesiones salinistas Carlos Castillo Peraza, disfrutó de los seductores atardeceres, en aquella lucha implacable para combatir a los grupos simpatizantes del ex gobernador Carlos Sansores Pérez con el Diario de Campeche.
Sin poder evitarlo, no puedo compartir tanta alegría por los pirricos resultados de tantos años de lucha que ahora se dan por satisfechos, cuando recuerdo los irreversibles daños que la actividad petrolera ha causado al entorno de nuestro paradisíaco otrora ecosistema, como tampoco las secuelas del "Ixtóc" que el 3 de junio de 1979 se descontroló y durante 280 días derramó millones de barriles diarios al mar, anexándole los detergentes, diluyentes y otros químicos traídos desde los Estados Unidos, hasta que el 24 de marzo de 1980, al desplazar al "Bombero Rojo" y su campanita de Gulliver se les mando a su casa , para que petroleros mexicanos controlaran el pozo, sin poder detener los efectos apocalípticos de esta tragedia y que hasta la fecha nunca ha obligado ninguna indemnización a la Industria pesquera camaronera, la cual se debate entre la vida y la muerte, con la restricción total del área de captura en el golfo de México, un total de 60 mil kilómetros cuadrados por culpa del tendido submarino que va hasta Tabasco, ampliamente cuestionado por la violación a las normas internacionales de seguridad y que llevan en uso 25 años sin mantenimiento, y a los ribereños los limita de una a cinco brazas, de una actividad tradicional sepultada por las barretas y plataformas que sostienen a la economía parasitaria de la alta burocracia gobernante de toda la nación quienes antes de cualquier incremento "amargo pero necesario" se suben los sueldos, viáticos y prestaciones primer mundistas.
A nadie perece importarle la suerte de tantos hombres y mujeres que aprendieron, nacieron y siempre llevaron el sustento familiar con su trabajo en esta actividad de un recurso renovable, aunque las alternativas que se plantean consiste en entrar a las neo haciendas de explotación humana, sin derechos humanos ni laborales en las maquilas, o aprovechar los nuevos desarrollos turísticos como el del Grupo Español "Mall" que ofrece esclavizantes oportunidades de albañilería y un futuro promisorio para desempeñar labores calificadas de intendencia, cuando este destino turístico se concrete y los campechanos podamos disfrutar el privilegio petrolero de limpiar, podar y mantener optimo, el campo de golf diseñado por el prestigiado Nicklaus y que con la complicidad del Instituto de Antropología e Historia destruye vestigios mayas repitiendo la reconquista de usar estas piedras que relatan nuestro origen, como cimientos de los lujosos departamentos .
Para los apologistas a sueldo y parte de la corte la suerte esta decidida a favor de los intereses de Juan Camilo Mouriño, aunque habrá de saberse hasta dónde se cuenta con la anuencia del propietario de Campeche, Jorge Carpizo. La primeras señal que se envía a los campechanos -en nuestro nuevo estatus petrolero- es la hiperactividad de Oscar Rodríguez Cabrera, tragedia del nepotismo del "Chel", quien asegura operar para la oficina de Los Pinos y en reciente entrevista televisiva recordó, sin el mínimo pudor, los apoyos en gasolina que el Grupo Energético del Sureste le proporciono a la candidatura de Roberto Madrazo contra Francisco Labastida Ochoa, cuando su padre, en el PRI, avaló las listas de candidatos a diputados y senadores recomendados por Carlos Hank González y al final, el pobre sinaloense terminó llorando su fracaso en la suite de la ex hacienda Huayamón, propiedad de Roberto Hernández, en Campeche.
La lucha por Campeche anexa un nuevo aditamento con esta designación de entidad petrolera, pues a pesar de los intentos mitómanos catastrofistas de sobre la declinación del manto Cantarell, la realidad es que los mejores tiempos de producción están por venir y quien controle el sureste de la nación partirá el gran pastel de chapopote.
¿Seguirá siendo el grupo de Carpizo?, ¿Logrará Juan Camilo y Felipe de Jesús el surgimiento de un nuevo clan energético con la fuerza que da la presidencia y el interés de Juan Carlos de Borbón? O ¿todo terminara en manos de "Renato el Campesino Seductor" del Instituto Campechano?.

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